¡Salud! por un año más

Se acerca otro fin de año; el fin de un ciclo más que hay que celebrar, y del cual también es importante tomar un momento para reflexionar sobre lo que se ha logrado, y agradecer lo que se ha vivido.

Un año más que agradecer

En la recta final, todos queremos dar prisa a los proyectos inconclusos y cerrar con broche de oro, pero lo verdaderamente importante sería hacer un recuento mental de aciertos y fracasos, de los deseos cumplidos y los que se quedaron en la lista.
Antes de comprar regalos o reunirte con amigos y familia, piensa un poco en ti. Es normal que te sientas nostálgico, melancólico o triste en algunos momentos, pero evita estancarte en lo que no pudiste alcanzar y mejor encuentra las razones y plantea soluciones. Tienes frente a ti una oportunidad de aprender a resolver esos errores, corregirlos y llegar a tu meta, aunque te tome más tiempo. Este ejercicio te ayudará a enfocarte en las tareas que deseas concluir este año. Te permitirá aprovechar la recta final y terminar tus pendientes, así como fijar metas para 2019.
Es probable que el trabajo y las responsabilidades de adulto te hayan distanciado de las personas que quieres, por lo que es hora de pasar tiempo con ellos. Planea reuniones con familiares y amigos. Muchos creen que es casi obligatorio llevar un obsequio a cada invitado, pero lo importante es aprovechar ese tiempo para revivir historias juntos y celebrar. Si necesitas reducir gastos, crea tarjetas navideñas en las que expreses a cada uno tu aprecio y tus mejores deseos, acompañada de un detalle pequeño como un chocolate o dulce típico.
Las metas cumplidas tuvieron un largo camino y cualquiera que sea tu religión o credo, agradece por todo. Aunque estés pasando por momentos difíciles, da gracias por las cosas buenas, por pequeños que te parezcan; por tu salud y de las personas que están a tu lado. Otra manera de agradecer por lo que tienes es compartir tu buena fortuna. ¡Haz algo especial por alguien! Puedes cooperar con alguna causa y ofrecer tus servicios; puedes aportar económicamente para apoyar fundaciones o hacer donaciones de ropa y cobijas para personas con escasos recursos.
Si tienes un asunto pendiente con alguien, es momento de cerrarlo. Contempla tus sentimientos más profundos y reconoce si estás cargando algún rencor y cómo te hace sentir. Es hora de superarlo. Perdonar no significa olvidar, significa aceptar, comprender y dejar atrás lo vivido. El perdón te beneficiará más a ti que a quien se lo otorgas. Cuesta trabajo, pero al final vale la pena porque te sentirás liberado de las emociones tóxicas. Cuando recuerdes el momento sin sentir enojo, habrás perdonado.
Es válido premiarnos por los triunfos. Sin embargo, procura no despilfarrar, sino compartir. Toma en cuenta que para demostrar afecto no necesitas incurrir en gastos excesivos. Busca que tus regalos sean útiles y te representen. Incluye en tu lista a algún amigo o familiar que se encuentre lejos de ti, en otra ciudad o en otro país, para mantener el vínculo y fortalecer el lazo que los une. Abre tu casa y tu corazón para recibir a tus seres queridos, y contagia a todos a tu alrededor la felicidad de terminar un ciclo; el ánimo de comenzar un año con nuevos bríos y la esperanza de cumplir anhelos. ¡Brindemos por un año más!