¡Mejor, sepáralos!

Si tienes esta combinación de mascotas, sabes que se pueden llevar muy bien, pero que también en cualquier momento puede suceder algún roce o disgusto que ocasione una pelea. En esta nota te decimos cómo puedes evitar peleas y lo que debes hacer cuando una suceda.

Si tienes un gato, un perro o varios de cada uno, considera los siguientes puntos antes o durante una pelea, para que ni ellos ni tú salgan heridos.

Antes de un enfrentamiento…

Para evitar cualquier conflicto es importante eliminar los factores que pueden provocarlo. En la siguiente tabla te enseñamos las razones más comunes de conflicto.
Considera también que los animales, aunque sean domésticos, tienen colmillos y garras puntiagudos y afilados, así que lo primero que debes tener en mente es encontrar el modo de evitar una lesión en ellos o en ti.

En un primer roce…

Si empiezas a escuchar que gruñen o chillan:

  • Primero acércate a ver qué sucede y analiza la situación.
  • Después, si averiguas lo que pasa, depende de ti y tu instinto decidir si puedes interrumpir la pelea con tu propio cuerpo para evitar que se hagan daño, u optar por otra medida.

Hay veces que algo tan simple como que sus collares se hayan atorado o que están asustados puede ocasionar que empiece una pelea.

Si en verdad están peleando…

Si la pelea ya está sucediendo, lo que puedes hacer es:

  • Comienza por gritarles o hacer un sonido fuerte que los haga voltear a verte.
  • En tu mente debes estudiar sus movimientos y nivel de energía mientras actúas. En este punto, el consejo de César Millán en su sitio cesarsway.com es enfocarte en el perro dominante (también se puede aplicar a los gatos), quien es el más fuerte físicamente o el más grande. Según el tamaño de los perros, puedes intentar separarlos por los collares con un movimiento hacia atrás y arriba.

“No lo tires sólo hacia arriba, porque esto podría indicar que también quieres pelear”, explica Millán.

Con los gatos…

Debes de considerar un modo de actuar distinto con los gatos si la pelea ya está sucediendo, pues no es posible hacer el mismo movimiento previamente mencionado por su tamaño, agilidad y que no suelen tener collar. Lo que puedes hacer es:

  • No los golpees ni intentes perseguirlos con una escoba ni otro objeto porque perderás su confianza y tratarán de defenderse.
  • Trata primero con un ruido fuerte, como un aplauso o un grito.
  • Puedes arrojarles algo que no los lastime pero los distraiga, como una almohada o toalla. Así, por lo menos uno de los gatos intentará alejarse del sitio o resguardarse; ésa será tu oportunidad de encerrarlos en diferentes habitaciones y concluir la pelea.

City Tip:

También, considera que si la pelea ya está sucediendo, para ambos casos puedes intentar separarlos arrojándoles agua fría.