Con esta guía, asegúrate de no olvidar boletos, sandalias y documentación cuando salgas de viaje. Sigue el manual y empaca como experto.
Falta poco para Semana Santa y tú ya tienes un pie en tus vacaciones, ¿pero sabes cuántas cosas llevar o eres de los que cargan con todo el clóset? Un estudio realizado por Volkswagen en 2015, sobre los hábitos de sus usuarios al organizar el equipaje para las vacaciones, reveló que empacar cosas “por si acaso” es uno de los principales obstáculos al preparar las maletas, pues en 84% de las situaciones las personas llevan cosas que jamás utilizan y sólo ocupan espacio. Esto, junto con los objetos olvidados, es uno de los principales problemas con los que debe lidiar un viajero, pues aunque se procure tener la maleta lista al menos un día antes de partir, la mayoría siempre olvida algo importante: como algún medicamento indispensable, zapatos de descanso o el cepillo de dientes. Pero a ti eso no te pasará con esta guía para empacar.
TODO CABE EN UNA MALETA SABIÉNDOLO ACOMODAR
Lleva ropa y zapatos que sean fáciles de combinar. Preferentemente no empaques nada que necesite planchado. Acomoda tus prendas doblándolas de manera vertical o enrolladas, así cabe un poco más. Si necesitas optimizar aún más el espacio, coloca los calcetines al interior de los zapatos. Te recomendamos hacer una lista aparte de los productos de higiene personal, como jabón, champú, cepillo y pasta dental, cepillo para el cabello, toalla. Deja el espacio para los souvenirs, así no regresarás con muchas más cosas; delimitar el lugar de los regalos con anticipación -y el presupuesto para ellos- te ayuda a no gastar de más. Una vez terminada la maleta, verifica que el peso esté bien distribuido. Camina un momento con ella para revisar que puedas moverla sin dificultad.

Coloca en tu maleta: Ropa, traje de baño, calzado, neceser, toalla, cosmetiquera, higiene personal, perfumería, maquillaje y estilizadores.
TU BOLSO DE MANO O BACKPACK SERÁ INDISPENSABLE MIENTRAS ESPERAS
Lleva todos tus gadgets y objetos de valor en él y no en la maleta grande; también lleva cosas para entretenerte, y las de aseo personal que puedas usar durante el trayecto. La idea es que no necesites nada de la otra maleta hasta el día siguiente. En trayectos muy largos, hay quien lleva también una muda de ropa por si acaso.
Coloca en el bolso: identificaciones y cartera, teléfono y audífonos, libro, lentes de sol, botella de agua, kit antimareo (chicles, dulces, algún medicamento).
Una semana antes de emprender el viaje, haz un listado de lo que llevarás en cada maleta (incluyendo tu bolso de mano) y revísalo al menos una vez antes de partir, así depuras las cosas inútiles. Si viajas en avión, las botellas deben ser de plástico en envases menores a 100 ml. Te recomendamos guardar las botellas grandes dentro de una bolsa plástica en tu maleta documentada y preparar porciones en botellas pequeñas. Revisa los boletos, identificaciones, y reservaciones media hora antes de salir de casa.
¿VIAJAS CON NIÑOS Y MASCOTAS?
Piensa también en sus necesidades para que el traslado sea cómodo. En viajes largos y con niños, lo mejor es mantenerlos entretenidos con películas, además de libros para colorear. Pero si quien te acompaña es tu mascota, hay algunas aerolíneas que permiten llevar perros o gatos en la cabina de pasajeros, pero debes contar con una jaula transportadora. Para mantenerlo tranquilo, llévalo a correr o jugar unas horas antes de partir para asegurar que haya gastado energía y no esté ansioso, y no le ofrezcas alimento antes de emprender el viaje, así evitas que vomite si se marea.
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