Los favoritos de sus categorías: Plátano y calabacita

Ambos productos tienen múltiples beneficios para la salud: Conoce cuáles son y por qué son los favoritos.

CALABACITA

ORIGEN
La especie Curcubita pepo, que conocemos como calabacita o calabacín, tiene sus orígenes en el año 7,000 a.C. en América. Fue muy consumida en la época prehispánica, y llegó a ser parte de la tríada mesoamericana que también incluyó frijol y maíz como base principal de la alimentación de los habitantes.

Se han encontrado evidencias muy antiguas de calabacita domesticada en Oaxaca, Tamaulipas y Puebla. También en Estados Unidos se encontraron especies de la misma clase, de hace 4,000 a.C.

Para conservarlas guárdalas en un lugar fresco, seco y a la sombra. Si las guardas en el refrigerador deben estar en una bolsa de plástico con agujeros de ventilación en la parte menos fría (suele ser el cajón de abajo).

Crece en climas cálidos: Sonora, Puebla y Sinaloa son los principales estados productores en el país, donde se produce en casi todo el territorio nacional con excepción de Chiapas y Tabasco.

¿Sabías que…?

Es una de las hortalizas favoritas en México, siendo el consumo anual por persona de 2 kilos.

PLÁTANO

ORIGEN

Es el fruto de la planta herbácea de la familia Musaceae, del género Musa. Existe una gran variedad en el mundo. Es muy probable que esta especie haya sido cultivada por primera vez en Papúa Nueva Guinea, hace al menos 7,000 años. Se extendió en la India, las Islas Salomón, Nepal y el norte de Australia. De Asia y Oceanía, el plátano alcanzó África y el Mediterráneo en el siglo V, llegando a América en 1516.

Consérvalos a temperatura ambiente. Si están verdes colócalos en una bolsa de papel junto a una manzana o un tomate, o en un recipiente junto a plátanos maduros, los ayudará a estar listos más rápido. Es recomendable no consumir el plátano muy verde, pues no es tan digerible; ni muy maduro, ya que pierde algunas vitaminas.

Es una fuente principal de potasio, ayudando a evitar calambres musculares y a mantener una buena presión arterial. Contiene fósforo, zinc, calcio y magnesio, que fortalecen el sistema óseo y muscular y es rico en vitaminas B6, C y ácido fólico. Aporta fibra de tipo soluble, lo que ayuda a que tus sistemas digestivo e inmunológico funcionen bien. Su azúcar y almidón te dan energía rápidamente, y sus compuestos fenólicos y flavonoides te protegen contra enfermedades crónicas.

¿Sabías que…?

Chiapas aporta el 19.7% del valor de la producción de plátano a nivel nacional, siendo el principal productor del país.