Disfruta de estas deliciosas y nutritivas frutas y compártelas en familia, ambas son deliciosas.

ALBARICOQUE

 

ORIGEN

Provienen de los árboles del género Prunus, nativos de China y se cultivan en muchas partes del mundo. En la actualidad, países como Turquía, Irán, España, Italia y Estados Unidos son conocidos por su producción de albaricoques.

 

Son una excelente fuente de vitaminas A y C, que contribuyen al mantenimiento de una piel sana y un sistema inmunológico fuerte. Además, contienen fibra dietética, lo que promueve la salud digestiva y ayuda a mantener un peso saludable. También son ricos en antioxidantes, como los carotenoides, que protegen las células del daño causado por los radicales libres.

 

Busca que tengan una piel suave y tersa, de color anaranjado intenso. Evita aquellos que estén demasiado blandos o tengan manchas oscuras.

 

PARA CONSERVARLO

Puedes guardarlos en el refrigerador en un recipiente abierto, pero asegúrate de consumirlos en pocos días para disfrutar de su máximo sabor y frescura.

 

¿Sabías que…?

Su nombre en inglés, apricot proviene del latín praecocia, que significa precoz o temprano. Esto se debe a que los albaricoques son una de las primeras frutas en madurar durante la primavera y, por consecuente, suelen ser de las primeras frutas que aparecen en los mercados después del invierno.

SANDÍA

 

ORIGEN

Es una refrescante y jugosa fruta. Se cree que su origen se remonta a las regiones tropicales de África, donde crece de forma silvestre. Desde allí, se propagó a través de las antiguas rutas comerciales hacia el resto del mundo. En la actualidad, se cultiva en diversas regiones, siendo China, Turquía, Irán, Brasil y Estados Unidos los principales productores.

 

PARA CONSERVARLA

Busca que sea firme al tacto y tenga un sonido hueco al golpearla. Asegúrate de que tenga una mancha amarilla en el lado opuesto al que estaba en contacto con el suelo, esto indica que ha madurado adecuadamente. Puedes guardarla a temperatura ambiente hasta por una semana. Si deseas disfrutarla fría, colócala en el refrigerador durante algunas horas antes de servirla.

 

Contiene una cantidad significativa de vitamina C, que fortalece el sistema inmunológico y contribuye a la salud de la piel. También es una excelente fuente de licopeno, un antioxidante que se ha asociado con la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.

 

¿Sabías que…?

Son en realidad bayas. Aunque asociamos las bayas con frutas pequeñas, como las fresas o las frambuesas, una baya es técnicamente una fruta que se origina a partir de una sola flor con un solo ovario y tiene múltiples semillas en su interior. En el caso de la sandía, su pulpa jugosa y sus semillas cumplen con esta definición.